Love of lesbian, uno de los grupos de más renombre del panorama alternativo español regresan tras 5 años con su nuevo disco, V.E.H.N, que no está dejando a nadie indiferente.
LOL, los lesbianos, amor de lesbianos… Son muchos los apodos que le han puesto a este grupo sus oyentes, pero los conozcas como los conozcas una cosa está clara: Todo el mundo conoce a Love of Lesbian. Estilo y gusto aparte, el grupo no deja a nadie indiferente, no sólo por característica música, sino por sus poéticas letras a la par sensibles que divertidas y por los numerosos éxitos que han ido cosechando en sus más de 20 años de carrera (y si no es por todo esto, a alguien les sonará como el grupo que hizo un concierto de 5.000 personas sin distancia de seguridad durante el COVID).
LOL ha vuelto hace tan sólo unos días para presentar Viaje Épico Hacia la Nada, su último álbum de estudio tras la publicación en 2016 de El Poeta Halley.
El álbum cuenta con 12 canciones entre las que se incluyen dos colaboraciones y 3 idiomas en total entre sus letras y… ¿Qué decir?, se siente como un auténtico viaje épico hacia la nada. Como era de esperar, la banda ha regresado más renovada y a la vez más ella misma que nunca. A pesar de las nuevas influencias y cambios en las temáticas de sus letras, V.E.H.N es puro Love Of Lesbian y sorprende, pero no decepciona.
La primera canción, Viaje Épico Hacia la Nada, fue uno de los adelantos de la obra, lanzado el pasado diciembre y bautizado por ellos mismos como “el tema más duro” del disco por la dedicatoria que representa a Mario, un amigo fallecido de la banda. Para acompañarlo lanzaron un vídeo con letra e imágenes enviadas por seguidores durante la dura etapa que fue el confinamiento domiciliario de hace ya un año. Sin duda esta elección es idónea para representar la tristeza que encierra el tema y la extrañeza de este año que la banda pretendía también reflejar, dándole, eso sí, una pincelada de cariño y esperanza personificada en cada uno de esos fans de Love of Lesbian que participaron en el vídeo.
Musicalmente, a pesar de ser una canción bastante cañera, se perciben rabia y melancolía a la par, precisamente por la fuerza de la música y por la emoción que desprende la voz de Santi Balmes cuando canta desconsoladamente ¡con qué noticia empiezo hoy!. Viaje Épico Hacia la Nada representa un gran homenaje que estoy segura de que hará honor a la memoria de Mario.
Los dos siguientes temas, "Crisálida" y "Sesenta Memorias Perdidas" guardan, a mi parecer, cierta relación. Aunque es imposible afirmar nada teniendo en cuenta los dobles sentidos, metáforas y simbolismo que encierran siempre las letras de Love of lesbian, con sólo unas escuchas identifico estas canciones como odas a aquel que se va y a uno mismo. Frases como “tu crisálida se convierte en una soga si al final germina un tú sin ti” y “vi que la soledad es más antigua que cualquier Big Bang” calan hondo y atisban un momento duro, de desarrollo, cambio y dolor.
Crisálida también tiene lugar para el término nueva normalidad, con lo que interpreto también aquí referencias por doquier a la situación actual y en especial al confinamiento, durante el que se finalizó este álbum.
Por su parte, Sesenta Memorias Perdidas, nos habla de nostalgia y de terapia, del cansancio de la espera y de la conflictividad interna que acompaña el estar perdido en uno mismo. Este tema incluye una de mis frases preferidas del álbum en su “siempre me dicen deja la cabeza y hazle caso a tu corazón pero, ¿qué hacer cuando tu corazón está fatal de la puta cabeza?”.
"Viento de Oeste" es una de las canciones más interesantes del álbum y un auténtico soplo de aire fresco (nunca mejor dicho) con su constante ¿qué más da? Mientras que "Escuela de Danza Aérea" es otra canción que me recuerda a los LOL de 2016 que sacaban El Poeta Halley y hacían metáforas con instrumentos voladores sobre todas las etapas de la vida. Al igual que en Bajo el Volcán o en Planeador, los personajes son torbellino y aire y vuelan juntos en una fantasiosa escuela de profesores alados y que lleva a sus alumnos sobre Berlín y Manhattan. Una oda al placer y al amor preciosa y llena de metamorfosis y carga visual.
"Los irrompibles" es, bajo mi punto de vista, la guinda del pastel de V.E.H.N pues, aunque está lleno de canciones maravillosas, creo que ninguna más que esta encierra tanta alegría, esencia, genuinidad y ese sabor agridulce tan característico de Love of lesbian. La escucho y pienso en aquellos seres únicos de La Noche Eterna como si fueran sus hermanos o una evolución de los mismos. Los irrompibles es una canción que merece más una escucha que la lectura de una descripción y que puede hacer que cada día digamos ¡es hoy! Y hacernos presentirlo de verdad.
"Catalunya Bondage" y "El Sur", las dos colaboraciones del disco con El Columpio Asesino y Bunbury respectivamente, vuelven a mostrar aspectos nuevos de Love of Lesbian y sorprender al oyente. Catalunya Bondage es un divertido retrato de la escena legal y moral actual con una narración exhaustiva y esos sonidos animados y estridentes tan Columpio Asesino. La voz de Cristina es profunda y encaja a la perfección con la rapidez y acidez de la canción. Destaca la última parte de la canción en la que se intercalan un par de versos en catalán y se acaba declarando “romanticismos los justos”. El Sur, por su parte, fue también una adelanto y es otro relato lesbiano de un amor y su ruptura simultáneos llenos de locura y dolor. El sur de la canción representa esta locura que hace al protagonista pedirle a la santa cruz a pesar de que es bien sabido que Love Of Lesbian no son precisamente cristianos fieles.
En contraposición, "El Mundo" es una oda al amor puro y evoca armonía y pertenencia al mundo al hablarnos de querer y de naturaleza, de “tú y yo” y de árboles, estrellas y luciérnagas. El Mundo me recuerda a Viento de Oeste por ser los temas más “planos” musicalmente de V.E.H.N, pero no por eso son peores; todo lo contrario, es alucinante todo lo que se puede llegar a transmitir sin infinitos picos en la musicalidad de una canción.
La última canción del álbum, "El Paso", podría considerarse lo más “experimental” de este, pues estamos hablando de más de seis minutos con una parte instrumental mucho mayor que la que contiene letra. Se trata de un final exquisito, pues refleja perfectamente un “adiós” siendo emotivo pero también tranquilo y con un ah ah ah oh pegadizo que siempre agradecen aquellos a los que les cuesta aprenderse las letras. La musicalidad de esta canción es rica y colorida, da casi la sensación de que se esté contando una historia y no se echa de menos una mayor cantidad de letras, sino que se saborea y se disfruta con gusto tal y como es, con el parón de en medio incluido.
Ana López
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