Tras 20 años de carrera y 4 sin sacar disco, Sidonie han regresado este 2020 con un proyecto diferente a cualquier cosa que hubieran hecho (ellos y cualquier otro grupo)
El regreso de Abba, el nuevo álbum de la banda catalana acompaña la novela homónima de su cantante y compositor, Marc Ros, complementándose con ella.
En sus propias palabras, no es que una cosa no pueda entenderse sin la otra, sino que se complementan y cuentan conjuntamente una misma historia. La semana pasada estuvimos con ellos y nos hablaron un poco más en profundidad del proyecto.
Ambicioso teniendo en cuenta la forma tan efímera que tenemos de escuchar música actualmente, El regreso de Abba cuenta con 23 canciones compuestas simultáneamente a la escritura de la novela, entre las que encontramos temas que componen los personajes de la misma.
Según Marc, el proceso de creación no podía ser de otra forma ya que, mientras escribía, no podía evitar preguntarse cómo serían las canciones que componían los personajes, así que se metía en la piel de los personajes y las creaba, todas con el toque y el estilo de cada uno de ellos. Es por esto que el álbum cuenta con estilos tan diferentes; las canciones de Doménech son descritas por Marc como californianas, las de Hugo, más oscuras y las de Abba muy mediterráneas, melancólicas, muy Costa Azul.
Aunque la gracia de este proyecto es escuchar el disco y leer la novela para obtener la experiencia completa, aseguran que esto no es indispensable (aunque sí recomendable) y que pueden entenderse perfectamente por separado.
Sidonie conciben el disco como una banda sonora para el libro y era fundamental para ellos conseguir que ambos tuvieran esa conexión y diálogo que les hace parte de lo mismo; todos sus esfuerzos fueron a que eso no se perdiese y a conseguir el equilibrio novela-disco en un diálogo constante sin que uno sobresaliera por encima del otro y están tremendamente orgullosos de pensar que lo han conseguido. Esto se ejemplifica en elementos concretos del disco como las transiciones, la inclusión de un diálogo de la novela en la canción "La bailarina rusa con los ojos de telescopio"...etc.
Son conscientes de que va a haber mucha gente que lea el libro y no escuche el disco y viceversa, pero su trabajo está hecho y no pueden pretender que todo el mundo quiera hacer ambas cosas. Marc contaba entre risas una anécdota de ese mismo verano en la que una chica le sacó la novela por la calle para decirle que le estaba encantando, pero que odiaba a Sidonie: “Creo que a gente como esta chica el disco le interesaría”.
Es a raíz de haber conseguido esto es cuando se plantean seguir extendiendo el universo transmedia de Abba, Hugo y Doménech en un proyecto teatral o audiovisual: No se conoce el caso de ningún grupo o artista que haya hecho algo similar, crear un disco y novela que comparten un universo de misma historia, personajes y ambientes, por lo que reconocen que es un proyecto muy arriesgado.
“Si fuéramos buenos actores, que somos pésimos, o hubiéramos tenido nociones de cine o teatro, lo hubiéramos llevado a un proyecto audiovisual”, dice Marc.
Es inevitable que escuchando el disco se venga esto a la cabeza, siendo artista u oyente; el carácter narrativo de las canciones es claramente palpable y es fácil percibir que se cuenta una (o muchas) historia.
Sidonie aseguran que estaban obsesionados con que los personajes fueran reales y estuvieran bien construidos, preguntándose constantemente “¿te irías a tomar una copa con Abba o Hugo?”.
Al preguntarles por el proceso de creación de este proyecto tan loco todos coinciden en que fue precisamente eso, una locura, no sólo por la enorme cantidad de trabajo que requirió sino por la situación con el confinamiento y la pandemia. Marc reconoce que fue un gran esfuerzo y que aún lo nota incluso físicamente: “Fue un gran error para mi salud. De lunes a viernes escribía la novela y los fines de semana me iba al local de ensayo a preparar el disco”. Incluso llegó a decir que alguna vez le pillaron hablando solo en un estado febril.
Explican que el proceso de grabación fue distinto al que habitúan para cualquier otra cosa. Estaban apunto de sacar el disco cuando llegó el confinamiento y al final no tuvieron más remedio que grabarlo por separado; Marc y Jess las voces y Axel las percusiones. Aunque raro, al final, como nos pasa con casi todo lo afectado por el confinamiento, dicen que incluso fue bonito y pudieron sacar algo de ello. Al pasar más horas solos, había más tiempo y espacio a la creación y por eso el disco está lleno de armonías y coros: “Era lo que tocaba y había que disfrutarlo”.
Sidonie aseguran que no querían que la pandemia afectara para nada al disco. Si la novela está ambientada en el verano de 2019 cuando ni Abba ni ninguno de los otros personajes sabían nada de una pandemia, esto tenía que mantenerse así.
También está el tema de que la novela está escrita por Marc y puede ser difícil imaginar cómo Jess y Axel fueron capaces de integrarse y comprometerse con el proyecto, teniendo en cuenta la estrecha relación que tienen novela y disco.
“Yo siempre intento meterme en sus corazoncitos y cabezas”, afirma Marc, “el momento que más nervioso me pone de mi trabajo es cuando tengo que enseñarles las canciones, pero son tan educados y cuidadosos… Yo sé cuando una canción no les gusta por la cara que ponen”. Es aquí cuando interviene Axel para decir que, aunque resulte poco creíble, nunca han escuchado una canción de Marc que no les guste y eso es una suerte. “Algunas quizás te gustan menos e incluso, a la hora de decidir cuales grabar, hay canciones buenas que no encajan en el disco, pero nunca he escuchado una canción de Marc o Jess mala. No sé que pasaría si le diéramos al play y no nos gustara la canción, porque nunca ha pasado”. Marc cita a David Burns, asegurando que nunca se compone con libertad total, sino sabiendo que eso que estás componiendo va a ir a parar a algún lado: Él siempre tiene en mente a Axel y a Jess, componiendo para ellos y pensando constantemente en qué les puede gustar.
A pesar de la sinceridad de los miembros, reconocen también que nunca eres capaz de ver un proyecto desde fuera, estás demasiado metido dentro y nunca sabes si tu opinión es 100% objetiva, por eso tienen “cagadas” en su carrera.
Hay canciones que escuchan con el paso del tiempo y no les parecen tan buenas y también al revés; al escuchar canciones de sus primeros discos se dan cuenta de que no eran conscientes de estar creando cosas tan increíbles:
Las decisiones que toman y el hecho de que les guste o no una canción también tienen que ver con el momento vital en el que están.
Axel y Jess fueron los primeros lectores de la novela de Marc y este jura que se moría de nervios, pero que le dieron consejos muy útiles. Por ejemplo, a Jess le encanta que haya tantísimas referencias en la novela y que esté llena de cultura musical, dice que llegó a recordar discos que hacía incluso 20 años que no escuchaba. Axel, por otro lado, fue el corrector de la novela y tuvo un papel fundamental. Ambos afirman que les resultaba difícil opinar acerca de la novela, porque al final era algo muy personal y aunque pudieran comentarle cosas concretas no podían decir nada sobre cómo estaba escrita, porque al fin y al cabo era algo de Marc, pero esto no quiere decir que les costara implicarse, todo lo contrario: Para ellos se volvió la novela más importante del mundo.
“Con la novela pasa lo mismo que con las canciones, sabíamos que sería buena porque Marc tiene talento para escribir una novela”, dice Axel, “queríamos ayudar en lo que sea si en ciertos momentos nuestra opinión valía para algo”.
La novela "El regreso de Abba" no era leída por Axel y Jess como quien lee el proyecto de un colega, sino que eran conscientes de que eso era parte de Sidonie y de su historia, por lo que su forma de ayudar y repasar ha sido como si se tratara de su propia novela.
Se sienten profundamente orgullosos del disco y aseguran que todo parte de ese punto: Si se hubieran mantenido al margen por considerar que es una creación más personal de Marc nada hubiera sido lo mismo. Desde el primer borrador sintieron que esas palabras eran parte de su historia y eso ha hecho que el proyecto sea lo que es.
Sidonie es un grupo que lleva ya más de 20 años sobre los escenarios y, aunque es cierto que tienen un estilo propio muy marcado, inevitablemente han pasado por fases diferentes.
Al preguntarles de qué modo consideraban que ha cambiado su estilo musical en El regreso de Abba, no dudaron en contestar que el salto a latinoamérica, por donde giraron en 2018 para celebrar su 20 aniversario: “Mi guerra tiene ritmo de cumbia, Ragatón tiene un montón de percusiones del gran Rambo…”
A pesar de las pinceladas nuevas, muchos medios hablan ya de este disco como la obra cumbre de Sidonie y, aunque ellos no pensaban esto para nada mientras lo componían, dicen, ahora se dan cuenta de que es “puro Sidonie, quizás más que nunca”. Encuentran en El regreso de Abba pinceladas de todos sus discos anteriores y es por ello su disco más Sidonie. “Este disco a veces costazuelaba un poco, en parte porque está ambientado en los mismos sitios. Costa Azul hablaba de nuestro mediterráneo, que es Cadaqués, y el disco hay estribillos que son puro Costa Azul.” Aseguran que esto daba lugar a un debate sobre su identidad que incluso les preocupaba, pero que sin duda han hecho un repaso por toda su carrera, incluso habiendo hecho por primera vez una aproximación a la música latina, que quizás sea la faceta más nueva y arriesgada de toda la obra.
En cuanto a canciones concretas, fue inevitable que surgiera la pregunta de cuál es la favorita de cada miembro de Sidonie, teniendo en cuenta la pasión con la que hablaban del proyecto y su implicación en el mismo. Marc se reía diciendo “aquí hay que mojarse”, para terminar por elegir "Buenas Vibraciones" como la suya, recalcando que sólo actualmente. Axel se decanta por "Abba y Mathieu" y para Jess hay una lucha constante entre "Buenas Vibraciones" y "Mi Guerra", que adora por la alegría que tiene. Podemos considerar esto recomendaciones de Sidonie, aunque El regreso de Abba es un disco que vale la pena escuchar de principio a fin. Hay canciones que quizás sintamos que no entendemos por falta de contexto, el nuevo proyecto de Marc, Axel y Jess es una delicia musical y si esto no nos parece suficiente, sabemos que leyendo la novela obtendremos una experiencia y viaje completos al universo de Abba, Hugo y Doménech.
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